Ayer conocíamos que la Comisión de Hacienda y Función Pública daba luz verde a la norma que, como parte del proyecto de ley para la estabilización de empleo en el sector público, propone que los interinos que hayan ocupado una plaza de forma ininterrumpida durante más de tres años se conviertan en fijos sin necesidad de oposición, sólo con concurso de méritos. Esta norma, si bien ha superado el primer filtro, todavía debe someterse a debate en el Congreso de los Diputados. De aprobarse, ¿qué interinos tendrían que presentarse a oposiciones? ¿Realmente se evitan las oposiciones?

Según documentos a los que ha tenido acceso la prensa, las oposiciones no se evitarían del todo. Sin embargo, la valoración de las distintas fases sí que cambiaría de forma notable. Tal y como leemos en El Español, “la fase de concurso conllevará un 40% de la puntuación total, y en ella se tendrá en cuenta mayoritariamente la experiencia en el cuerpo, escala, categoría o equivalente de que se trate pudiendo no ser eliminatorio el examen que se haga en la oposición”.

Por otro lado, y siempre de ser aprobado el proyecto de ley, deberíamos tener en cuenta los tiempos: sólo afectaría a las oposiciones que se convoquen después de 2022, con las excepciones de los interinos del sector sanitario y de la enseñanza, que se les aplicaría la norma “un año más tarde y con una normativa propia”.

El texto no está cerrado y, tal y como leemos en la noticia enlazada anteriormente, “no se descartan cambios”. Queda un largo camino por recorrer y todavía, insistimos, no hay nada oficial. Todo sigue como hasta ahora.

 

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